viernes, 30 de marzo de 2012


MUSICOTERAPIA
Para los que no hayan leído la novela 1984 de George Owell o visto la película del Show de Truman, os recomiendo que lo hagáis. Eso sí,  primero mirad el prospecto porque tienen muchas contraindicaciones para la salud mental. Te harán sentir rechazo a las normas sociales establecidas y ver hasta qué punto somos simples marionetas… ¡pero bueno, no pienses más no la vallamos a joder y te quedes más colgao que Spaiderman colocao!.
Esto solo era una simple introducción para impresionar un poco, y que todos digan:
-¡Qué tío más culto, que bien preparado, que ilustrado!
¡Mentira cochina! Si yo en el Columela no repetía… tripitía. Después de llevarme allí la tira de años no conseguí el título de bachiller, pero a cambio me quisieron hacer un contrato de alumno fijo pagándome hasta la antigüedad. ¡Está claro que fue antes de la reforma laboral del Rajoy!
Verdaderamente dignos de admiración son los autores de letras del cancionero español, grandes escritores y poetas de cuya inspiración surgieron los grandes pilares en los que apoyar los valores fundamentales de nuestra nación. ¡Aquí me he “pasao”! ¿decirme que no suena a facha…facha?.
Intentaré analizar los profundos sentimientos expresados en algunas de dichas creaciones compuestas para la voz humana y la influencia que ejerce en los oyentes. Me perdonarán este atrevimiento, pero siento la necesidad de saber en qué forma me pudo cambiar la personalidad al haber crecido a ritmo de una sinfonola y quiero ahora investigar si lo que me ronda por la cabeza fue motivado por mi propia naturaleza o por influjos musicales externos.
Comencemos eligiendo un tema al azar.
LAS GRECAS
Te estoy amando locamenti,
pero no sé cómo te lo voy a decir.
Quisiera que me comprendieras,
y sin darte cuenta te alejas de mi.
Prefiero no pensar, prefiero no sufrir.

Lo que quiero es que me beses,
recuerda que deseo tenerte muy cerca,
pero sin darte cuenta te alejas de mi
ESTRIBILLO
Si me acobenzo, si me acombenzo,
dame tu ausenci que sabe a beso,
Nai no nai no na, nai no nai no na,
nai no nai, nai no nai, nai no na.
Nai no nai no na, nai no nai no na,
nai no nai, nai no nai, nai no na…

Vamos con la primera cuarteta
1.   Te estoy amando locamenti: Esto es Chiquito de la Calzada declarando su amor a una bambina italiana.
2.   Pero no sé cómo te lo voy a decir. Quisieras que me comprendieras, y sin darte cuenta te alejas de mi: ¡Pero vamos a ver!... si no le dices “na” como te va a comprender, ¿Cómo quieres que sepa que te pirras por sus huesitos?... llámalo al móvil, mándale un mensaje…¡chochi, pégale un CHILLÍO que se sigue alejando y va a doblar la esquina!.
3.   Prefiero no pensar, prefiero no sufrir. Lo que quiero es que me beses, recuerda que deseo tenerte muy cerca, pero sin darte cuenta te alejas de mi: No quieres pensar, no quieres sufrir… lo que quieres…es lo que quieres, vamos que no hace falta traducción. ¡ESTÁS MÁS CALIENTE QUE LA PLANCHA DE UN CHIRINGUITO!, tú coges al maromo y le arrancas a “bocaos” los botones de los vaqueros.
4.   ESTRIBILLO: Si me acobenzo… de esto que queréis que os diga. He consultado todos los diccionarios bilingües de habidos por haber, ¿Cómo no sea ESPERANTO?, y el AUSENCI si le sabe a beso deduzco que tienen que ser los labios (en esperanto). Ya lo del NAI NO NAI NO NA, tengo dos hipótesis. La primera es que se trata de una errata de imprenta y como ella según nos cuenta no sabe como decírselo al muchacho pues lo que pasa al final es que NO HAY NA DE NA, y ese hubiese sido el texto correcto. Al no ser que se trate de mi segunda hipótesis…es decir un anuncio subliminal contra la marca NIKE.
Con esto concluyo mi primer análisis.
FORMULA V
El amor que yo soñé
jamás lo pude conseguir
no pensé que en realidad
pudiera sucederme a mí

Sé muy bien que todo amor
significa esclavitud
perderé mi libertad
por ganar tu juventud

Yo prefiero ser esclavo
estando enamorado
a ser libre como el viento
y vivir sin tu amor

ESTRIBILLO
Tengo tu amor,
para qué quiero más
Me conformo con ser feliz
qué más puedo pedir
1.   Esto no lo vamos a descomponer, lo analizaremos al completo… Resulta que el Chaval lo que siempre ha soñado es mandar a tomar por el culo su libertad para ser el esclavo de una jovencita muy mona. ¿Y cuando pasen los años, todas las noches le duela la cabeza, use bragas sobaqueras, y los pezones le rocen con las zapatillas de paño?...¿quién te quita ahora los grilletes?. ¡¡Felizzz!!, ¡¡MASOQUISTA!! Eso es lo que eres. No se me ofendan las féminas que en el caso contrario pasaría lo mismo… la barriga no le dejaría verse aquello que solo le serviría para mear siempre que la próstata se lo permitiese.
¿Qué más puede pedir?... jamón de pata negra, un sofá “pa” ti solito, el mando del televisor, una cerveza fresquita… ¡Eso sí que es felicidad! ¡¡GILIPOLLAS!!
Creo que ya no hace falta continuar con la investigación, me acaban de venir al recuerdo las letras de los villancicos populares… prefiero cruzar el charco en patera a las órdenes de Fracesco Schettino (capitán del Costa Concordia) antes que desentramar ¿cómo beben los peces en el río por ver a dios “nacío”?, y “ven acá volando que el chocolatillo se lo están llevando”… eso parece la orden a un helicóptero de vigilancia aduanera.
Total que he llegado a la conclusión que si la música amansa a las fieras, hay letras que las dejan carajotas para toda la vida.

miércoles, 28 de marzo de 2012


ESTO ES UNA PORQUERÍA
Una semana de levantera, esto es para volverse loco (aunque algunos  lo estábamos ya de antes… nunca es mala la ocasión para achacarlo al levante).
¡Eolo, Señor de los vientos, dios de la mitología! Vete al carajo unos días…El carajo no es picardía, simplemente lo he mandado a la canastilla del palo mayor para que haga de vigía. Después de varias jornadas traerá tal mareo que venderá su divinidad por un colchón, y ¡OJALÁ! que hasta navidades le perdure el resacón.
Hoy me falta inspiración y los dedos en el teclado son como los misiles de Irak, que nadie los encontró. Me he arrastrado hasta la farmacia buscando mi salvación.
-      Por favor Sr. Boticario ¿tendría pastillas de RAM para aumentar mi memoria?
Se ha leído el VADEMECUM desde la A hasta la Z, y sigo sin solución por no encontrar la receta.
Estoy tan pasmado como años ha en los CAMPILLOS…Jugábamos allí los chiquillos, por darles algún nombre a aquella jauría de niños asilvestrados, y si nos venía alguna necesidad (lo que entendemos por mear o cagar) lo hacíamos entre las hierbas no muy lejos de las vías. Ya que por mucho corrieras, si se venía la carga atrás, antes de llegar a casa pringabas las escaleras.
Viniéronles retortijones a un vecino muy querido, del cual no daré su nombre por pasar a ser difunto. No me cabe la menor duda que el día de autos almorzó un potaje de habichuelas, la cara como la cera, desabrochando el botón corría como un ladrón luciendo sus posaderas. La urgencia era importante pues ventoseaba constante a ritmo de ametralladora. Con sudores frio llegó hasta el muro de la FOISA, y olvidándose del pudor allí mismo se acuclilló, mientras los demás nos matábamos de risa.
Ser curiosos de niños es natural, lo que no era tan normal es que  aquel que fue a “cagar” después de una hora jiñando el mojón seguía colgando. Todos nos fuimos avisando y sin dejar de mirar el pepino llegamos incluso a apostar cuando sembraría el pino.
Cual sería nuestra sorpresa cuando se levantó el cagón y al ponerse el pantalón vimos que no era estreñido, y lo que todos pensamos que de caca era un colgajo, era un signo de buena salud, y aunque suene muy soez…¡ Eso sí que era un CARAJO ¡.
Pasaron mucho los años cuando siendo como fui conductor de Tranvía, debido a otro retortijón potajero quise como el avestruz meter la cabeza en un agujero.
Después de meterme entre pecho y espalda una berza que estaba para ponerle un piso me fui con mis bártulos a las dos de la tarde camino de cumplir con el servicio nombrado. Ese día tenía asignada mi faena en la línea número dos que recorriendo el Campo del Sur finalizaba su trayecto en Plaza de España.
Ya en la primera vuelta la suspensión del vehículo al rodar por el adoquinado fue poniendo en marcha mi barriga como si se tratase de una hormigonera. Mientras que hubo público yo por el escape iba soltando a la chita callando. Una vez que llegué a la parada de la iglesia del Carmen, miré por el espejo retrovisor y vi que el autobús se había quedado vacío.
¡Por fin solo!, me explayé. Fui soltando tales sonoras ventosidades que los cristales parecían que iban a estallar, tan aliviado me quedaba que me puse a cantar a voz en grito imitando al Pavarotti. A los pocos minutos llegué a la Plaza de España, paro mi autobús y hecho el freno de manos. Cuando más relajado estaba oigo el timbre y veo que se enciende la luz de parada solicitada.
¡Imposible, esto no puede ser, si no había nadie! Giré la cabeza y vi como una señora permanecía en la puerta del centro con la intención de bajarse y mirándome con una cara de absoluta repulsión.
Tras abrir la puerta y ver marchar a la viajera me quedé sumido en un trance, buscando una explicación a lo sucedido pude observar que el espejo retrovisor estaba mal colocado y no permitía ver al primer asiento situado justo tras de mí, para un mayor agravante en aquella época el puesto del conductor no estaba tan aislado de los viajeros como lo están ahora, entre los dos asientos solo había una pequeña mampara de cristal que iba desde la altura de mi cabeza hasta mi cintura.
Fue tal mi asombro que no fui capaz de pedir disculpas…¡aunque bien pensado… lo mismo le gusto mi canto, aunque fallara la orquesta!

lunes, 26 de marzo de 2012


MIS HIJOS ME LLAMAN MACGYVER
Reconozco que soy como el MAESTRO LIENDRES (que de nada sabe y de todo entiende), le meto mano a todo o a casi todo…entended lo de meter mano en el termino laboral, no seáis guarrillos. Con una caja de cartón, una pila de petaca, papel de plata y una bombilla, soy capaz de hacer un microondas (que funcione o no, ya es otra cosa), lo mismo frio una corbata que plancho un huevo.
Ponedme un taladro en las manos y dejo en paños menores a Freddy Krueger, soy el terror de los tabiques.
Todo esto me viene de la etapa de la infancia considerada de vital importancia para el desarrollo personal. La estimulación sensorial durante los seis primeros años de vida es fundamental para el perfeccionamiento cerebral… (SALMO 23.- El Señor es mi Pastor… ¡¡¡Entonces yo soy una oveja!!!, bueno preferible una oveja que ser un CABRITO).
Valla rollazo de introducción os he metido con lo simple que hubiese sido comentar que en la década de los 60 nuestra escuela fue la calle, que ante la falta de herramientas y tecnología todo lo hacíamos a mano y a golpe de imaginación. Por no existir no existía ni el papel higiénico, hasta que llegó el del ELEFANTE (lindo para las almorranas), antes de la llegada de este para limpiar el ojal de nuestras posaderas usábamos las hojas del Diario, eso sí, respetando las esquelas. Pues cagarse en los muertos de alguien era un insulto muy gordo.
Hoy cuando veo a los niños jugar con coches teledirigidos y motor de gasolina, digo - ¡Que pamplina!. Con lo auténtico que era ese aro de llanta de bicicleta y esa guía de alambre, dando vueltas a la plazoleta. Como vacilabas y además los colegas te pedían una vuelta. Eran prácticas de formación para el desarrollo del sentido del equilibrio y de los gemelos. Todo esto lo sé por la Wikipedia, porque antes el no tener sentido del equilibrio se llamaba “PELLEJAZO”, y los gemelos eran dos bocas más que alimentar que nacidos al mismo tiempo se parecían una “JARTÁ”.
¡Ese barco velero, cargado de sueños, cruzó la bahía… Pantoja, déjate de tanta historia!. Ese barco estaba hecho de corteza de pino, el casco lo modelábamos raspándolo en las paredes de granujitos que tenían los bajos de los edificios, el mástil era un palo de polo o de chupa-chups, la vela un trozo de hoja de papel, y de tripulante le poníamos un escarabajo y navegaban con la rima del bicho. Tú limítate a devolver los millones y usa Guillette para las patillas, que de pelos tienes tela, más que un oso en la sobaquera.  Los de puntales, hechos con sudores, lágrimas y dos cojo…desde las pateras a pesqueros de Vilela, eso sí que eran barcos.
El PADEL que pijo y que actual… ¡”pa” darles una cachetá!... Eso ya estaba inventado, lo que pasa que en Puntales pasábamos de patentar, éramos como románticos en el neandertal. Dos tablas redondas o “cuadrás”, da lo mismo si solo es para jugar, dos puntillas y un palo para el mango, la pelota de los zapatos gorilas y el callejón de Joaqui. ¿No es lo mismo eso que el pádel?... ¡Pues ya está!... ¡el invento Made in Puntales!.
Y esos zapatos modernos que parecen dos cunitas. Extraordinarios para los dolores y la espalda, no discutiría yo eso. Pero si te paras a charlar con aquellos que los usan, te marean con el balanceo, parecen tentetiesos,
- ¡Tate quieto ya cohones, que me estás poniendo nervioso!.
-¡No!, es que son mis nuevos zapatos MBT, especialmente indicados para personas con dolores de espalda o musculares. ¡Son una maravilla!
-¿Y cuanto cuestan?
- 200 Euros.
-¡Vale… “po” los MBT te los puede MTBien por el culo!
Buenas las sandalias cangrejeras que te las ponías a finales de mayo y hasta octubre no te quitabas con la hebilla “to oxidá”. El pie se te quedaba a rayas como el pellejo de un tigre, que además le venía bien porque iba a juego con el olor y te duraba el tatuaje hasta la siguiente primavera. Eso sí, no te curaba los dolores de espaldas, ni los golondrinos y si le dabas una “patá” a una piedra se te quedaba la uña del dedo gordo para que la usaran de peineta (con su correspondiente mantilla) las cofrades de la oración de huerto.
¿Os acordáis el encendido de la antorcha en las olimpiadas de Barcelona?... Pues a ese tío lo enseñamos en Puntales con una vara de adelfa, una cuerda, una caña con una latilla “doblá” en la punta y dos mese en los campillos apuntando a las chimeneas de la térmica.
¡Y lo de PESCA RADICAL!, héroes de la mar luchando con olas de 15 metros, contra el frio polar, a la captura del cangrejo de las nieves… ¡Para valor el nuestro!, con una espiga de caña, la tanza y masa de la panadería Kaki, en lo alto del caño con un pestazo que llegaba a 2 km. A la captura de la lisa mojonera y rodeados de gurripatos que eran más peligrosos que los buitres leonados. ¿Y a ver si los americanos eran capaces de coger cangrejos moros?... si es a Bin Laden y no hay pruebas de que lo hayan “atrincao”.

jueves, 22 de marzo de 2012


DE BUSCONES, LAZARILLOS, RINCONETES Y CORTADILLOS
Creo que en el título me he pasado de longitud, parece más largo que el pregón del heladero. Aquel que a golpe de pedal venía de la quinta puñeta. ¡Que arte! ¡que vozarrón!, no es que fuera Camarón, pero con su proclama inundaba los oídos de alegría. Era como en el calor del estío un viento fresco
-      ¡Heladitooossss… que riquito son… que riquito son!, ¡ay que taco Paco!
Aunque no le hiciera gracia a Pedro (el del puesto), para él una competencia desleal pues Pedro lo de cantar…¡Uf!, solo te cantaba las cuarenta cuando tu padre te mandaba a cambiar las novelas de Marcial Lafuente, y la portada estaba manchada, alguna página arrugada, incluso si al cowboy le faltaba un diente. - ¡Pedro, por favor, no me des bronca tan dura!, ¡que mi padre es el dentista y en la próxima novela al malo le pone la dentadura!.
El aburrirnos no tenía cabida en nuestras seseras, no teníamos play station, ni nintendo. Eso sí una tele en blanco y negro, pero como verla en color era nuestro afán se le pegaba a la pantalla varias tiras de papel celofán. Si hoy siguiéramos así viendo la televisión, creerían con toda razón que las peroratas del rey era la proclamación del Día del Orgullo Gay.
No éramos malos quizás algo pícaros, y si una brecha se abría de una atinada “pedrá”, allí no pasaba “na de na”. Tras pasar por Cáritas un remiendo, y al otro día con las heridas de guerra volvías a pisar la tierra y a compartir plazoleta con el que fue tu enemigo. Primero miradas serias, como si odiases de veras… y todo se va al carajo al llegar la regadera.
-¡Dale al chorro más fuerte!
Una patulea de niños arengaba al conductor de la fuente errante. Niños de churretes, sandalias de gomas y pantalones con tirantes. Así éramos los de antes, ¡ojo! no critico a los de ahora, pero con tantos logos parecen propagandas ambulantes.
Corriendo en paralelo al camión, terminábamos empapaos y acabando la vuelta al ruedo al Campillo del tirón. Allí tumbados en la hierba dejábamos que el sol de agosto nos secara las vestiduras.
Mientras a tu alrededor volaban las libélulas de colores brillantes, te sentías como ausente hurgándote la pringue que quedaba entre los dedos de los pies,-¡Ay qué asco!... dejaros de tanto remilgos que era un auténtico placer.
El Zorca era un viejo barco varado a varios metros de la orilla, la distancia exacta era…no seáis primaveras eso dependían de los grados de la marea. Pero diré para vuestra información que era una gran escuela para el aprendizaje de la natación. El curso consistía en lo siguiente: marea llena, agarrado a los hombros de un hermano mayor te llevaba nadando a braza hasta el Zorca y te subías al barco. Una vez subidos a bordo y sin ningún previo consejo era tu propio pariente el que te daba el empujón, y al agua con tu pellejo. Durante varios minutos te observaban inmutables como tragabas agua, pataleabas, te hundías y si al minuto no salías a flote entonces se compadecían y sacaban al monigote. Pero aquello no era maltrato, eran cosas de niños… pero de niños hijos de…mi propia madre. Al final aprendíamos o moríamos en el intento.
Uno de los juegos más practicados era “el inmóvil”, era de carácter intelectual, desarrollaba más la mente que el ajedrez. Sobre todo si cuando te daban el cate usaban un zapato. Con el ímpetu que se lanzaban más de una vez fallaban y el tacón aterrizaba en tu rapada nuca, con esto tu cabeza alcanzaba un notable desarrollo luciendo un hermoso bollo.
¡El guerrero del Antifaz, sin mover, sin reír…! Otro juego interesante. Hoy con la crisis y gracias a su práctica más de uno encontró empleo fijo como estatua humana. Quizás Rajoy en su reforma educativa lo ponga como módulo de formación profesional, aunque yo posiblemente le mande una invitación a la Moncloa para que venga al BARRIO y juguemos con él al “INMOVIL”

martes, 20 de marzo de 2012





Haría cualquier cosa por recuperar la juventud... excepto hacer ejercicio, madrugar, o ser un miembro útil de la comunidad.
Oscar Wilde

A finales de los sesenta, como caída del cielo, llegó al barrio la revolución.
Hasta entonces vivíamos tranquilos como aldeanos… ¡teníamos hasta vaquería!, recuerdo las vacas pastar por el verde del Campillo y juntos a ellas jugaban los niños sus partidillos, eran mansas no envestían pero tenían su peligro, sobre todo sin entusiasmado en el juego mirabas a quién centrar sin observar la “majá” que cerca dejó la vaca…¡¡¡chass!!!...hasta el tobillo de caca y pringándose el balón ya salió con dirección a la frente del delantero… ¡ golazo, pedazo gol ¡… ¿Pedazo?... ¡ uff !.. ¡ pestazo!, el que llevaban los dos, uno en coco y otro en la pata. Y aquí no queda lo peor, porque si el partido fue en miércoles hasta el sábado no tocaba baño (en una bañera de cinc en la que las madres cambiaban el agua cada tres o cuatro niños, al final en el fondo quedaban sedimentos de chicharrones con manteca colorá). Los días se te hacían años, ya nadie se te acercaba, y si alguien preguntaba ¿Qué es lo que te pasa, que estás tan solo? Los graciosos contestaban:
-¡Es que este niño es muy repelente!.
Exiliados mandaban al barrio a curas que en el seminario como la mierda de vaca, según el Sr. Obispo, apestaban a “rojillos”. El del bonete se creía que como Puntales estaba junto al Cerro del Moro, los estaría enviando  cerca del África Sub-Sahariana, pensando que nosotros éramos una tribu de caníbales y nos comeríamos a los curas desleales al régimen.
Le salió la cosa rana, y de la tarde a la mañana de ser el portal de Belén se convirtió Puntales en la Cuba de Fidel, pero no porque nos revolucionaron curas, si no porque nosotros los revolucionamos a ellos. Y de otra tarde a otra mañana colgaron todas las sotanas., ¡bueno!... algunos se la arremangaron.
El Sr. Obispo seguía con su teoría de que éramos africano y mandó construir tres barracones para refugiados donde poder adoctrinarlos en el catolicismo. Otra vez la cagó, del catolicismo ya conocíamos el cuarto de las ratas en las monjas y los desfiles  al ritmo de “soldadito español”, además del dolor de brazo que te quedaba después de ser obligados a cantar el “cara al sol” antes de entrar a clase.
Pasamos de cantar al padre Usera, que además nadie conocía a ese fulano, y hasta el Cototo y Mangano comulgaron con Serrat, Paco Ibañez y Victor Jara.
Ese gran almacén de curiosidad llamado juventud creó su propia doctrina en aquellos barracones donde respiraron LIBERTAD en un país donde esa palabra era innombrable a golpe de bendiciones y sables.
Como dijo Shakespeare “LA SANGRE JOVEN NO OBEDECE UN VIEJO MANDATO”.
Todos aquellos sueños de revolución se fueron apagando con la muerte del tirano, acostado en un colchón y no ante un pelotón como todos deseábamos.
Fue mi joven generación la que ante la desilusión de una democracia descafeinada y con BORBÓN, quiso saltar barreras, borrar del mapa fronteras, vivir y sentir sensaciones hasta entonces desconocidas.
 ¿Qué íbamos a hacer?, ya no teníamos al Che, la primavera de Praga se fue quedando en las bragas, y al mayo francés se le cayeron las hojas. Arrojamos la toalla y nos convertimos en cobayas para mafias de la droga.
Con rapidez fuimos cayendo al abismo, daba igual, daba lo mismo. Fuimos libres de escoger una juventud eterna, no nos temblaban las piernas, fuimos la primera línea de la infantería en una guerra que no iba con nosotros.
Hoy con secuelas de aquellas batallas maldigo a los generales que a lomos de su “CABALLO” colgaron en su pechera medallas manchadas en sangre, mientras la joven infantería siempre joven moriría en el barro de las trincheras.
DEDICADOS A LOS AMIGOS Y HERMANOS QUE RENUNCIARON A SER VIEJOS





jueves, 15 de marzo de 2012


Un niño no deseado

Capítulo III

Puntales por navidad como en casi toda la humanidad se creaba un aire diferente, fueses o no creyente… entendedme cuando digo lo del  aire, metafóricamente me refiero al espíritu y no al viento, está claro que es distinto el levante en agosto que el norte en diciembre. ¿Entendido?, esto no va de tortillas de papas con crujientes de arena (plato típico veraniego) ni de sabañones en las orejas. Esto era algo más espiritual…aguinaldo al basurero, aguinaldo al cartero, aguinaldo al de las bombonas, aguinaldo al barrendero… pero sin ánimo de lucro igual que Urdangarín. Todo era paz y amor, como si fuésemos todos hermanos, ¿y para qué queríamos más? ¡si ya en casa éramos ocho!.
Da lo mismo, eran días de alegría, eso sí los polvorones en su fecha y a granel, y no como ahora que entre El Corte Inglés  Mercadona no nos dan un descanso “pa” repetir el ajo del gazpacho, ni quitarnos el aceite en los dedos de los pimientos fritos…¡Sres. Míos! ¿no entendéis, por favor, que en septiembre con el calor?... ¿Quién SE COME UN ALFAJORRRR…?
Volvamos a lo de antaño y así nos damos cuenta el montón que tenemos de años, ¡como para jugar al mangüiti o al contra!... ¡si ya me salen agujetas hasta cuando juego al parchís!
Greenpeace se fundó en puntales por aquellas navidades pues no había quien nos ganase a ecologistas ni defensores de los animales. En la mesa ni jamón ni langostinos, no como otros asesinos que aniquilan a la fauna. Para beber Anís del Mono, que tras dulce borrachera se reciclaba la botella y a golpe de tenedor hacíamos la percusión de los clásicos villancicos y hasta del Porompompón.
Si he de contar la verdad, diré que no trataba iguales a todos los animales…¡EL PAVO!... esto es punto y aparte.
23 de diciembre de mil novecientos sesenta y pico, era una hora temprana esperaba yo en el techillo junto al bar de Ataulfo a que bajase algún amigo. Tras la cabina de teléfono apareció Miguelito Castañeda con un cuchillo como la Colada del Cid y tras él, cuál fue mi sorpresa, atado con una cuerda de cáñamo al pescuezo un pavo negro zaino con unos mocos granate que le arrastraban por los suelos.
-¡Koe!...¿te vienes a los Campillos “pa” matar al pavo?
-¿Mariquiqui lo sabe?
-¡Claro picha, si me lo mandado ella!
Miraba al pavo y veía a algún hermano mío, eso me hizo asentir. Sería grata la sensación de cortar algún gaznate y esta era la ocasión.
Jalábamos de la cuerda camino de los campillos, el pavo presintiendo su ejecución hacía uso de su espolón y consiguió agarrarse al parachoques del coche de Puntales. Hizo falta un adoquín “pa” soltar al pajarraco. Con el pavo cojeando, de la soga yo tirando y Miguelito empujando…¡que cante íbamos dando!, pero por fin ya llegamos a un patíbulo improvisado tras el patio de los ciegos.
Con la daga en la diestra y el pescuezo en la siniestra vino a decirme Miguel.
-¡Agarra al vicho!
El ave viéndose en las últimas luchaba como GLADIATOR, yo batallé como un jabato pero el pavo me podía, hasta con la pata chunga me endiñó “comía”. Llegó un momento que temí más por mi vida que él mismo por la suya.
A todo esto Miguel viendo la bravura del rival sin atinar donde daba le asestó tres “puñalás”, el pavo se puso a cantar con mucho sentimiento…¡coño, si es que le dolía!. Así pasó medio día con el pavo revolcaos dándole por todo “laos” hasta ahogar sus lamentos.
Aunque os parezca un cuento esto es pura realidad. Y si lo siento es por Mariquiqui, ya que aquella Nochebuena a la hora de cenar en vez de pavo “asao” no le quedó más remedio que comer pavo a lo “siniestrao”.
Mañana marcho a mi cueva, no me seáis impacientes y esperar el próximo relato “pa” la semana siguiente.

miércoles, 14 de marzo de 2012


Un niño no deseado

Capítulo II

El ser un niño sin nombre no es difícil de llevar, cuando tu apodo te gusta. ¿Para qué ponerte un santo? Si fue santa la inquisición…y además llamarse Jorge, que todo el mérito que hizo el cruzado fue de matar a un dragón… ¡ y van y se lo creen !. Yo me quedo con Koe y como mucho le corté el rabo a una lagartija.
A pesar de todo no me puedo quejar pues fui recibido con gran calor familiar. En un piso tan pequeño diez personas allí viviendo, dos periquitos, un mono, y en la cocina puchero hirviendo… ¿Me vas a decir que no?... ¡ Eso sí que da calor !.
Si alguno habéis visto la película TRANSFORMERS, esa era mi casa cuando llegaba la noche. El sofá se hacía cama, el mueble bar…cama, el aparador…cama, y así sucesivamente. Es más cuando se acostaba toda la gente el portón quedaba blindado, no por seguridad, es que aquello era un “tetris” y todo encajaba a la perfección…¿a ver quien tenía cojones de poder abrir el portón?.
Poco a poco fui creciendo, por mi carácter introvertido y cabezón… ¡bueno!...lo de cabezón era también algo físico… ¡A lo que iba!... Con seis años hubiese vendido mi alma al diablo por un kalashnikov, -¿Qué para qué?... para cargarme a mis hermanos. Eran una panda de maltratadores psíquicos. Imaginaros un niño como yo… “pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón”, resumiendo; CARAJOTE. Mis hermanos cantando a coro:
¡Koíto llora!…
¡Koíto llora!…
Y como yo era tan obediente, pues lloraba.
Menos mal que eso fue un periodo corto de tiempo, a los quince  años se olvidaron ya de mí.
Hoy en día daría la vida por ellos, sobre todo si me invitan a papas con choco.
¡Por cierto!... ¿a que no os habéis fijado cuan de erótico es el diminutivo de mi apodo?.
Volvamos a mi infancia. Enclenque, torpe con los pies, más lento que el discurso de navidad del Borbón, tropezaba con un papel de fumar y me caía de boca echándome las rodillas abajo, a los tres días tenía dos postillas como tortas de Inés Rosales. Parece increíble que yo sobreviviese al Puntales de aquella época…¡Menos mal que no nací en los grupos de la marina!
El puro instinto de supervivencia me hizo agudizar el ingenio y arrimarme a los más fuertes. En esos años uno de los superhéroes del barrio era Miguel “El Viudo”, buen amigo de la C/ Real que me sacó de muchos apuros.
Solo en Puntales se les ocurría apodar “El Viudo” a un niño… ¿no sabéis que la iglesia no le permitiría casarse tan joven?, ¿Cómo iba a enviudar?.
A pesar de todo mi niñez no fue tan lánguida y está cargada de anécdotas que os comentaré en otros capítulos.
Siempre que escribo tengo en la mente al que será para siempre mi gran amigo y hermano del alma, Faly Gaviño. Tengo una imagen imborrable grabada en mi mente y mi corazón, me veo con él, los brazos sobre los hombros del otro, con las narices pegadas al escaparate de la droguería de Luís “El Cabeza”, el vaho nubla el cristal por el que miramos los juguetes en la víspera del día de reyes. En ese cristal quedaron muchas ilusiones y muchos mocos.
¡Hasta pronto vecinos!

martes, 13 de marzo de 2012



Un niño no deseado

CAPÍTULO I
Tengo la certera convicción de que al nacer fui un niño no deseado, se que suena duro, pero tirando del hilo de la madeja voy desenmarañando mi historia y no hay la menor duda que lo que digo es cierto.
Retrocedamos en el tiempo, volvamos al 7 de octubre de 1961… ¡Joder no tacharme de loco!, ya hay muchos científicos que con pulso de luz de alto impacto y con laser investigan sobre esto. Aclaro, no investigan en que yo fuese un niño no deseado sino acerca de viajar en el tiempo. Aunque la tecnología necesaria para construir una máquinas capaz de ir
al pasado o al futuro está muy lejana y sería muy costosa, algunos físicos señalan que las teorías actuales admiten esa probabilidad, y para aquellos incrédulos les diré, que más cara es la hipoteca de mi piso y si Rajoy no lo impide en taitantos años habré conseguido dejarle el “marrón” a mis hijos, y estos a mis nietos, y así sucesivamente. Por lo que creo que viajaré antes en el tiempo que terminar de pagar la hipoteca.
Lo dicho… ¡vámonos al 61!
Veo a mi padre acariciar la barriga de mi madre, posar su oreja sobre ella para oír algún ruidito del bebé o sentir sus pataditas, correr al puesto de Guillermo porque a mi madre se le antojaron fresas… ¡Y UNA MIERDAAA¡. Mi padre sería un hombre muy generoso, gracias a él comían muchísimas personas. Y eso no hay quien me lo discuta, ¿o no era el que les hacía las dentaduras postizas?. Pero de esto a que se le cayese la baba con su nuevo retoño… ¡IMPOSIBLE!... ¡SI YO HACÍA EL NÚMERO OCHO!.
Más que al puesto de Guillermo se iría a lo de Marcelino y seguro que no a por fresas, fijo a por oro segoviano… que mientras mi madre paría, el recibía la anestesia.
Mientras mi madre en el parto de dolor gemía… ¡bueno!... después de ocho, más bien se le caerían. Al resto de hermanos los mandaron a la playa a espera de que llegase el nuevo inquilino, ya que en un piso de 60 metros, ocho niños y el matrimonio… ¿cómo iba a ser deseado?... ¡era un estorbo, COÑOOO!.
Aquellos siete inocentes sentaditos junto a la corriente esperaban la fumata blanca, y fue Alfonsi el que dijo:
-¡Mirad arriba, el niño ya ha nacido!
Evaristo, por ser el mayor, le contestó con dulzura:
-¡Este niño es carajote!, ¡que esto no es como el PAPA!... el humo blanco es de la TÉRMICA y viene de la zona franca.
Y así aparecí por Arenal nº 1 -2º derecha, y no os digo que aquí tenéis vuestra casa porque ya somos más de doscientos  y a ver donde coño os siento. Ya “CON OCHO BASTA”.
Una vez presentado en sociedad vino la elección del que sería para siempre mi nombre.
Eso fue de gran categoría. Toda la familia reunida en la mesa del salón, por cierto era más grande el calificativo que el paradero  en sí, cada uno de los miembros escribía en un papelito el nombre que más le gustaba (esto sin que se enterase la guardia civil, ya que en plena dictadura mi familia era muy demócrata), al que no sabía escribir se lo ponía el de al lado (con lo que trampa hubo seguro). Como bombo de la suerte se usó la hoya exprés, se da por entendido que sin puchero, y se introdujeron los papelitos.
Aunque mi falta de conocimiento era evidente y aun no me habían bautizado, por lo que era “morito”, recé a Alá para que mi padre no ganase la votación… acuérdense que venía de Marcelino y con su “puntito” o “puntazo”, el escribió RAIMUNDO. Muchas veces me acordé de Stevie Wonder cuando publicitaba en la tele…-“Si bebes no conduzcas”, podía haber añadido…-“Y tampoco pongas nombres”.
Alá es grande, ganó mi hermana Esperanza. ¿Qué nombre fue el que escribió?... ¡Da igual!... Llegó mi hermano Fernando que con poco más de un año le dio por decirme Koe, y Koe se me quedó.
CON LA INTRIGA DE MI VERDADERO NOMBRE, PRÓXIMO CAPÍTULO EL II

Manolo el ditero ¿era alienígena?

1ªHipótesis de que era un extraterrestre:
No podréis negar su enorme parecido con los personajes de Star Trek o los de la Guerra de las Galaxias (alto, chepado, pequeña cabeza pegada al tronco con inexistencia de cuello, brazos más largo de lo normal, tez blanquecina, pies y manos desproporcionadas)… Aquí empezaron mis dudas.
2ª Hipótesis de que era un extraterrestre:
¿Cómo llegaba al BARRIO?, ¿de dónde venía?. Todos lo ignoramos, solamente sabemos que de repente aparecía en el techillo junto a bar de Ataúlfo. Cuando se dio cuenta que sospechábamos de sus apariciones espontáneas comenzó a llegar en movilette , pero yo comprendí que se trataba de una estratagema para evitar que lo descubriésemos. Estoy seguro que ese vehículo no era un simple ciclomotor, sino que era el resultado de una cirugía estética-mecánica realizada en una nave nodriza a un aparato tele transportador, cuyo nivel de sofisticación hicieron crear una réplica exacta del vehículo más utilizado por los terrícolas y de esta manera conseguir continuar con su intrusismo como humano.
 3ª Hipótesis de que era un extraterrestre:
Su trabajo era parecido a un recaudador de impuestos. (Esto es una pequeña aclaración para aquellas generaciones que no han conocido lo que era un DITERO). Por películas y cuentos todos sabemos que los recaudadores eran tipos broncos, maleducados, y desagradables. Manolo era todo lo contrario, dulce, amable, de voz melosa, en pocas palabras… medio carajote, o al menos eso es lo que nos hacía creer, ya que como ser de una inteligencia superior y desconocida manipulaba nuestras mentes sin necesidad de usar la televisión, simplemente con una mínima conversación  sobre rebecas o pantalones, siempre finalizaba la charla arrugando la nariz y subiendo el labio superior dejaba ver unos pequeños dientes amarillos “perlas del chino” cuyo significado era una robótica y absurda sonrisa… .- ¿Pero de que te ríes gilipollas?, ¡si te acabo de decir que no te voy a pagar! Daba lo mismo era la forma que le habían ordenado de rompernos todos los esquemas. Con lo cual este detalle tampoco me cuadraba.
4ª Hipótesis de que era un extraterrestre:
Su pequeña y apepinada cabeza portaba un cabello insuficiente, al parecer en la nave nodriza no disponían de células madres suficiente para la creación de más cabello. A pesar de su inteligencia aun ignoraban muchas cosas de los humanos, por ejemplo; ¿por qué no mandaron ninguna misión especial a la barbería de Diego el Varilla?... allí hubiesen encontrado todo tipo de células madres, de rebuscar bien en el recogedor seguramente hasta orejas enteras.
Bueno esos pequeños errores hicieron que Manolo tuviese que hacerse un peinado a lo mallorquín, es decir se enrollaba ese mechón de pelo ralo como si fuese una ensaimada y lo aplastaba sobre su mollera para que no se le viesen los microchips.
5ª Hipótesis de que era un extraterrestre:
Volviendo al pelo… ¿cómo los días de levante no se despeinaba?, parece increíble pero así era. Otro detalle más; el uniforme, pasaba desapercibido con esa chaqueta marrón clarita de mezclilla, esos pantalones grises y las botas de borrego vuelto y suelas de goma. ¿Alguien lo vio con otra ropa distinta?... ¡JAMÁS!, si fuese ditero humano tendría más posibilidades que nadie de cambiar de traje, ¡coñooo!, que era su negocio vender ropa fiada.
6ª Hipótesis de que era un extraterrestre:
 Por último 28 de diciembre, fecha muy próxima a la extinción del planeta según el calendario Maya. Por todos conocidos ese día es el de los Santos Inocentes, en la década que me sitúo las páginas del Diario de Cádiz eran de dimensiones extraordinarias y de gran utilidad, se podían usar de papel higiénico, para hacer gorros de papel… por supuesto antes de darles el primer uso del que hablamos, y sobre todo en susodicho día para hacer grandes muñecotes de papel que adaptándoles un alambre en forma de gancho los usábamos para colgarlo de la espalda de algunos ingenuos que mofándonos de ellos paseaban el muñecote por todo el BARRIO perseguidos por las risotadas de la chiquillería.
Manolo siempre estaba predestinado a pasear en su chepa uno de esos monigotes, pero al contrario de los demás cuando se daba cuenta de la broma no se le ensangrentaban los ojos ni nos llamaba hijos de p…
Está claro que Manolo era un extraterrestre.


La reencarnación Francisco Gómez de Quevedo Villegas y Santibáñez Cevallos

Uno de los autores más destacados de la historia de la literatura española, amigo de lo conciso, ingenioso en el juego de palabras, picaresco y satírico. Lo que queráis saber de él lo podréis buscar en Wikipedia, yo solo os contaré lo que para todos es desconocido y así adelantarme al Iker Jiménez que con su Cuarto Milenio ya anda tras esta investigación.
Nacido en Madrid el 14 de Septiembre de 1580, muere en Villanueva de los Infantes el 8 de Septiembre de 1645.
Podréis comprobar que fue el primer INDIGNADO  de su época ya que estando a punto de jubilarse a los 65 y sabiendo que el tatatarabuelo de Rajoy pretendía alargar la jubilación a los 67, dijo.
Con seseo son tus deseos
Que curre de más veinticuatro meses
A tus castas irán mis heces
Y ojalá te mire un tuerto
Que antes que esclavo
Prefiero muerto.
Y así se marchó D. Francisco antes de cumplir los sesenta y cinco, no sin antes sacar su ingenio y con pícara verborrea pidiera un último deseo a cualquier divinidad.
-Si existe un más allá, espero por una simple razón que no se encuentre muy lejos ya que los huesos se mueven al ritmo de mi bastón, que no estoy para una maratón, prefiero la reencarnación y que sea hombre de nuevo, pero por favor en lo del currar te pido que ni en lo físico ni en lo mental. Aunque mi herramienta fue la pluma en esta vida curre un taco, prémiame en la siguiente con un colchón de los Mónaco.
Otorgó la divinidad el deseo del escritor, pero como es lógico en la burocracia  su expediente se extravió y llegó su reencarnación allá por el siglo XX.
Al principio y por su deseo de no trabajar lo quisieron alejar de la corte y mandarlo para el norte, pero el muerto protestó.
-Otra vez te pido dios…pal norte no, que la gentes son muy malage. Déjame elegir el viaje a las cálidas tierras del sur, a un sitio con playa, de gente humilde y graciosa, eso sí donde haya una plaza para estar pendiente de los cuchicheos, y tascas donde el vino haga libre el cachondeo, donde no falte la música, y aunque tu enemistad sea patente con el vecino de enfrente cuando llegue una desgracia en tu casa dejas que entre y en tu copa se caliente.
-¡Basta ya de tantos deseos…Quevedo que me mosqueo!
-Todo poderoso…es que la demora fue larga
-Bueno…¡jartible!...concederé tus deseos
-¿Te vale Puntales?
-Como tú eres el que mandas…pues ¡vale!
Y con esta solución llegó La reencarnación Francisco Gómez de Quevedo Villegas y Santibáñez Cevallos, vecino del Careta, el de los caballos.
Ya al renacer le dijo a la comadrona:
-Este parto va pa largo, que yo de correr ni en broma.
Tras el primer susto que se llevó la señora aun fue peor el segundo, puesto que fue necesario la cesárea, no por que el niño fuese grande, ni el cordón estuviere en el cuello liado… fue porque el malandrín de piernas venía cruzado y sentado en una silla de tijera.
Aunque parco era en palabras en su bautismo volvió a hacer uso de la oratoria, ante la pila y con mucha parsimonia díjole al Sr. Cura.
- Si no es mucha la molestia suprima lo de Francisco Gómez Villegas y Santibáñez Ceballos, y déjalo simplemente en QUEVEDO.
Al cura le dio un pasmo y hubo que aflojarle el alzacuello para que pudiese respirar, medio repuesto del sofoco le tiró el agua desde lejos mientras en una nada ortodoxa homilía y poniendo los pies en polvorosa, dijo:
 -Yo te bautizo QUEVEDO, y ¡hasta luego Lucasssss!.
De esta manera de cara al futuro, se ahorro el Quevedo tinta y sobre todo trabajo a la hora de firmar.
Siendo un niño solo jugaba ”al guerrero del antifaz sin mover….”, ya que como decía la canción no tenía que moverse. Las bolas y el trompo no estaban hechos para su delicada columna vertebral.
Nunca se casó, era evidente que lo de coger en brazos a la novia para cruzar el umbral de la puerta era harina de otro costal. Cuando llegó su madurez acampó con su silla en la puerta del bar de Joaqui y allí siempre esperaba al alma caritativa que lo convidara, no por falta de dinero, sino por no levantarse de la silla ya que el que lo invitaba de camino que pagaba le acercaba el vaso.
Como Lázaro se levantó y caminó pero no por un milagro, sino porque Juaqui cerró el negocio. Tardó 48 horas de la puerta de Juaqui a la del bar de Ataulfo, y en esa nueva ubicación y a la sombra del techillo continuó su acampada.
Fue en aquel lugar donde descubrió, tras caerle en la cabeza una calicha del techo, la ley de la gravitación universal. Más tarde, escuchando la conversación de dos niños que esperaban el autobús, se entero que otro tío llamado Newton la había descubierto antes. No le dio la menor importancia, lo único que pensó, por pura deducción, que Newton sería Quevedo en inglés.
Como en todos lados en Puntales también hay personas que no se sienten en paz consigo mismo sino se meten en la vida de los demás, y cierto día uno de estos metomentodo (era de la marina… ¡mentira, que es broma) quiso con una fabula intentar cambiar el modus vivendi de Quevedo, y al igual que si se tratase de un analfabeto se dirigió a Quevedo con cierta prepotencia:
-¡Quevedo!...
El oyente levantó la cabeza con ritmo pausado y contestó:
-¡He!
A lo que el enterao le soltó una parafernalia.
-Dos hombres se dedicaron un día entero a cortar leña. Uno de ellos trabajó sin detenerse a descansar, y junto una pila de leños bastante grande. El otro lo hizo durante lapsos de cincuenta minutos, con otros intercalados de diez minutos en los que descanso. Al terminar sin embargo tenía una pila de leños mucho mayor. ¿Como pudiste cortar tanta leña? le preguntó el hombre que trabajo sin descanso. Esta fue la respuesta: Mientras descansaba, afilaba el hacha.
-¿Qué te parece Quevedo?
Contestando Quevedo:
-¡Carajote, dile a Thomas Welch que yo tengo bombona!


Don Kuriaky de la Plaza

Nunca imaginó Cervantes que su caballero errante cobrase algún día vida y no fue mala la partida de aquel lugar de la Mancha si al final con sus huesos dio en un barrio y una plaza donde sin yelmo y sin lanza ahogase toda esperanza de encontrar a su Dulcinea.
Abandonado por su escudero y muerto ya Rocinante adoptó otro jamelgo.
-¡FURIAAAA, CABALLO NEGRO!
Una mañana llegó, sin saber nadie de donde, un enjuto caballero bañado en vapores de alcohol.
 Temores, dudas y desconciertos sembró su aspecto harapiento ante los mayores del lugar, todos ellos repartían entre la chiquillería cocorrones a do quiere para evitar que el beodo llenara sus mentes de lodo con tanta palabrería. Cuan mal ellos nos hacían pues sus temores impedían que los niños disfrutasen  de pura filosofía.
-¡DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN A MI!
Cuantos agravios sufrió, pero sin desfallecimiento gritaba a los cuatro vientos ilustrados pensamientos, para algunos simples monsergas, pero los que entendían su jerga se quedaban asombrados. Más tarde todos sabrían que no era un charlatán buhonero, sino un culto carpintero que allá por los mentideros contaban, que renunció a su cordura en la batalla más dura que es la de perder a su amor.
Refugiabase en la noche dejando sus sueños volar entre las ruedas de un coche. Cantaba bajo la lluvia dejándose por ella empapar, y en centro de la plaza con un fantasma en sus brazos, bailaba con largos pasos, al son de una gramola el Vals de Las Mariposas.
Su vejez prematura conservada en alcohol nos hizo a todos pensar que el siguiente amanecer no constaría para él. Nadie volvió a apostar, pues el tío de la guadaña con Kuriaky se iba de cañas, pero siempre a Casa Joaqui y nunca hasta el cementerio.
Hacía uso del vino quizás para callar sus penas y mientras corría por sus venas su voz derrochaba alegría, arte y sabiduría. Pero nunca lo utilizó para alardes ni bravuconerías, solo él sabía cuando el alcohol se hacía agua que sus penas florecían, ¿para que las flores rancias que ancladas en la solapa hacen daño al corazón?.
-¡ Juaqui… lléname la copita ¡ y cámbiame unas pesetas, qué voy a pulsar las teclas y a buscar a Dany Daniel, que yo me la entiendo con él.


...Cada día en tu jardín te veo hermosa
Como una de las mil, mil mariposas
tú me enseñaste a bailar entre tus rosas
una tarde como ayer, maravillosa...

...Dime si tú, hoy,
quieres bailar con el son de
el vals de las mariposas conmigo.
Quiero bailar, si
quiero bailar con el son de
el vals de las mariposas contigo

Dedico este homenaje a Paco el Kuriaquy. Tratándose de un borracho firmes huellas dejaron sus embriagados pasos por la plazoleta del BARRIO.
No sé lo que hizo San Lorenzo para obtener el honor de dar nombre a nuestra PLAZOLETA, pero sí conocí a Paco y siendo ateo empedernido declaro a Francisco Santo, pues siendo buen hombre padeció burla y persecución, y cuando a su vejez purgó todas sus culpas, si es que alguna tuvo, fue el cáncer Santo inquisitorio quien no aceptó su “conviá” y lo llevo al mortuorio.
Termino estas cuatro letras diciendo de corazón… ¡PACO…KURIAKY, PUNTALES ES TU PLAZOLETA!.
"Más veces descubrimos nuestra sabiduría con nuestros disparates que con nuestra ilustración." Oscar Wilde
Koe Casas Moreno