HIPNOSIS

Siéntate, relajaterrrr, sigue con la mirada al péndulo, deja tu mente en blanco si no lo consigues esnífate media garrafa de Ariel, olvídate de la espuma que sueltas por la boca, eso es un daño colateral sin importancia... No puedes abrir los párpados, eso es normal he mojado la escobilla del rímel en Loctite, te pesan los brazos ¿a que si?... cuando yo te diga abrirás las manos y en el momento que sueltes las dos bolsas con los cuarenta kilos de papas gordas notarás como si te hubiesen quitado un peso de encima, antes de las cinco de la mañana sentirás cómo caes en un sueño profundo.

No te asustes está bajo los efectos de la hipnosis, vas a retroceder en tu vida varios años, las arrugas desaparecen, te vuelve a crecer el pelo pero hazte de un bote de ZZ porque puede traer algún piojo, la barriga se encoge, tus bolsillos se van a llenar de dos reales, gordas, duros y pejetas, si reculas a tu juventud quizás aparezcas con zapatos de plataforma, pantalones de campana y minipún. No te avergüences  ¿qué culpa tengo yo que fueseis así de hortera?... Es tarde de sábado has quedado con tus amigos en el escalón de Cáritas.

Ya estáis todos reunidos, sois seis o siete y  hace una semana  que comprasteis las entradas para asistir a un concierto de Tony Ronald en el Cortijo de los Rosales. Para crear ambiente hay quien se acerca hasta la sinfonola de Joaqui e introduce una moneda, pulsa las teclas correspondientes para que se desplace el rodillo y surja el vinilo por donde la aguja acariciando los surcos hará sonar la canción de ¡Help!.

La traducción del título de la canción es ¡Socorro! y eso parece un mal presagio.

Sin nadie percatarse de nada, las fuerzas del mal capitaneadas por Miguel el Viudo se dirigen por las escaleras de la C/ Arenal nº1 camino de la azotea... ¡efectivamente, donde Esteban tenía el palomar!

Son fuerzas oscuras, solo piensan en putear. Sus armas de destrucción masiva han sido recogidas en la basura de la frutería de Guillermo... ¡menudo arsenal! desde huevos podridos a tomates maduros.

Tú no pares, sigues moviendo los pies al ritmo de ¡help! e incluso puedes sacar del bolsillo trasero ese peine celeste con mango que solo mide 25 cm, continuas bailando mientras peinas tu melena, aprovecha la ocasión por que dentro de unos años... ¡todos calvos!

La música que no para de sonar evita que se escuche la orden de... ¡PREPARADOS, LISTOS, YAAA!

En un visto y no visto, guapos os han puesto... ¡Al carajo el concierto!... no os dieron tiempo ni a pedir ¡HELP!

Dentro de un rato te despertarás con el politono de Paquito el Chocolatero y no te acordarás de nada de esto, pensarás que todo ha sido un sueño...¡PERO NO!... ¡ES VERDAD!... ¡ESPERANZA AGUIRRE HA DIMITIDO!