LA REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA

Nos hemos dejado convertir en una sociedad consumista de las nuevas tecnologías, llegado el momento te ofende más el que se caguen en tus gigabytes que en tus muertos. ¿No tienes IPAD o TABLET?...¡Entonces eres un mindundi, tú no eres nadie!

Antes iba por la calle y veías a cualquiera hablando solo ¿y qué pensabas?...¡ya saltó el levante, otro loco anda suelto!... ¿correcto o no?. Pues ahora ese ya no es un majara, es que lleva conectado el manos libres, aunque la manos no las lleve ocupadas, pero es más cómodo que sostener el teléfono en la oreja... ¡Les da igual que los demás nos enteremos de las intimidades de su pareja!... ¡y eso tiene whatsapp!

En mis años mozos no existían los dichosos politonos, lo más parecidos eran los polis entonaos que eran los que se tomaban unos cuantos vasos de gañote en casa Ataulfo y a costa del personal  llevaban siempre la porra con venillas "colorás", o los que te cogían en Isabel la Católica, eso eran los polis que te ponían a tono haciéndote cantar hasta por bulerías. En los teléfonos todo el mundo teníamos el ¡RINNNGGG! y con eso nos valía.

Todo este maremágnum comenzó con los porteros automáticos. Eran ganas de tonterías, con lo bien que se abría el portón jalando de aquel cordón que surgía al exterior pasando por un boquete con el otro extremo atado al tirador del pestillo. Ahora telefonillos o video porteros. ¿Para qué tantas historias?... ¡si siempre que llaman te dicen que es el cartero!

¿Qué es por seguridad?... ¡Y MOJÓN PINCHAO EN UN PALO!... ¡más que me roba el gobierno y nunca han pisado mi casapuerta!

Lo electrónico se repite más que el ajo... correo electrónico, tarjeta electrónica, carné electrónico, libro electrónico, hasta cigarro electrónico que en vez de matarte de un cáncer te electrocuta.

Hoy cuando tus hijos hablan de la RED, tú que te crees muy docto entras en la conversación y suelta un discurso de como se cazaban jilgueros en los Campillos o de la pesca con el trasmallo. Te miran con caras raras hasta que te vas dando cuenta que la has cagado por listillo. Siguen conversando y sueltan que esto de la RED es el comienzo de otra era en la información, es una revolución tecnológica con gran capacidad de penetración...  Como tú no escarmientas y ya que dicen ser el hombre el único animal capaz de tropezar dos veces en la misma piedra, oyes lo de revolución y penetración... y entras a saco soltando otro rollazo del movimiento hippy  y además cuenta una trola de que tu estuviste en el festival de Woodstock, terminando con la proclama rancia de sexo, drogas y rock and roll... Ya mi hijo que me conoce mejor que yo, y como le di buena educación, me manda al carajo pero con un SMS, donde además me recuerda que yo a los festivales que más lejos llegué fueron a los de Bornos o al Luna llena de Jerez.

Despacito y con las orejas gachas me voy a mi habitación, arranco la CPU, enciendo el monitor, coloco el cursor sobre el icono de google y cliqueo con el ratón, entro en mi gmail, miro los correos y me voy a facebook, cambio la foto de mi perfil, entro en el muro de Puntales City, escribo mi publicación y allí como son buenas gentes me aguantan a este matraca soltándoles la monserga.

Todo lo escrito en el último párrafo... ¿a qué se entiende perfectamente?... ¡Pues si lo leyera mi abuelo me mandaba a los loqueros!. Y no le quito la razón ya que el alucinó por primera vez viendo girar el pitorro de la olla expres.